enero 11, 2011

Brujería

A las tragedias se le atribuyen causas misteriosas, sobrenaturales. Como una señal. La forma en que se comunican los sabios espíritus o la manera en que se cobran los dioses. Porque la venganza los hace tan divinos como el perdón a nosotros humanos. Debe ser así. Es más fácil cuando nos explica lo que a primera no se puede, por la razón, claro, aunque ella, por definición, servirá para construir el Olimpo y todos sus dioses. ¿Acaso –me dirán ustedes- no me refiero a la imaginación? Pero díganme entonces ¿cuando lo imaginado fue menos real? ¿Acaso no existió imaginación en la percepción de las galaxias moviéndose, de la esfericidad de la tierra? La hubo, mucho antes de comprobarse por medios razonados. El vuelo de la razón con sus alas mochas, en la totalidad de los despegues, sabe que en las nubes inmensas del desconocimiento, se empiezan a circundar, con aletazos cortos, por medio de la divagación. Mi deidad, en conclusión, no sería más que el resultado del desconocimiento, o del temor, que podría ser lo mismo.

Temor. O es mi amor un fantasma, una sombra que se explica por la proyección de un cuerpo en la repentización de la luz y la negación de la realidad, mucho mejor, o en las dimensiones sin mensura. En letras de Zoé, podría ser: “en el brillo del sol, en un rincón del cielo” Me explico el amor como un embrujo, porque no se de neurociencia, ni de psicología. Son sus métodos iguales a los de la hechicería, por no decir menos. No lo entiendo, aunque de la tinta escrita acerca de su influjo se podrían pintar las telas oscuras del cosmos, otra vez. Y así, nunca llegaremos, ni querríamos terminar; negándonos a los circuitos neuronales, a la liberación de hormonas o al básico, sencillo y poco literario instinto sexual.



Sin embargo nos regocijamos, y en extremo, de nuestra desgracia.Celebramos la ignorancia. La incomprensión. Nos hacemos talismanes, contras, amuletos, poesía y canciones, entre tantas, una que le favorece a esta entrada -y es por pura casualidad, lo aclaro- del gran combo de Puerto Rico, con toda su cátedra universitaria, la recomendada brujería, para el comienzo de esta nueva etapa del Blog, para desearles un feliz 2011.



2 comentarios:

Mariano Magnifico dijo...

El amor no tiene explicación, ya sea real o abstracta... simplemente es uno de aquellos misterios que nunca podrá ser analizado.

Vincent dijo...

Dicen que percepción es realidad. Podemos hacer las cosas tan fuertes, tan débiles o "tan inexistentes" como así lo decidamos, no importa si hablamos de magia o ciencia.

¡Saludos!